Yo quiero ser la próxima papa millonaria

Es alucinante ver proyectos tan tontos, como hacer una ensalada de papa, pueden convertirse en una fuente de dinero. Y es que ese ha sido uno de los casos más sonados en Kickstarter, la plataforma más famosa de crowdfounding de Internet. Donde un tipo llamado Zack Brown, por simple broma, publica que está recaudando fondos para realizar su primera ensalada de papa. Su meta eran $10, pero tal fue la reacción de los usuarios de Internet, que su proyecto al final del mes de campaña, logró recaudar la suma de US$ 55.492.
Es entonces donde artistas apasionados, como yo y como muchos de mis amigos colegas, volvemos nuestra mirada ante esta posibilidad de conseguir financiamiento para alguno de los tantos proyectos que se nos ocurren y a la de menos lograr un fenómeno como el de Zack.
Para los que no están muy enterados de qué es crowdfounding, es un mecanismo donde el autor de un proyecto, publica su creación con el objetivo de que otras personas se interesen en el proyecto y contribuyan con donaciones para lograr algún proceso o la totalidad de una producción. Esta campaña normalmente tiene una duración de un mes para lograr la meta propuesta. Normalmente lo que el autor brinda a cambio de la donación, es una copia del producto o simplemente menciones de crédito. Esto es muy abierto a la creatividad.
La posibilidad de acceder a este tipo de financiamiento es muy atractivo, en especial cuando vemos proyectos muy simples “en teoría” y que consiguen sumas exorbitantes de donaciones que permiten eventualmente llevar a cabo el proyecto y posicionar una empresa. Sin embargo como en todo en la vida hay mucha tela que cortar.
Personalmente vengo analizando este tipo de campañas desde hace unos 3 años y he visto pro y contras al respecto. Justamente me decidí a realizar este artículo a partir de una reciente publicación de campaña de mi colega, el talentoso David Álvarez, quien muy amablemente me permitió utilizar un vídeo de YouTube (se los comparto en este artículo) que realizó con el fin de informar los pro y contra que experimentó al llevar a cabo una campaña por la plataforma Indiegogo, su meta era recaudar fondos para la impresión de su primer libro para niños titulado “Mú”.

Desde mi punto de vista, la ejecución del libro está muy bien lograda, una historia simple, con un mensaje directo para un público meta específico y muy bien ilustrado, cumpliendo con tendencias actuales en ilustración digital. Sin embargo según lo expresa el mismo David en el vídeo, la campaña no fue del todo exitosa, para lograr la meta incluso él mismo debió buscar financiamiento por otras vías y depositar el dinero en Indiegogo al menos para no perder los aportes que ya habían realizado varias personas.
En todo este tiempo que he leído sobre campañas que han tenido éxito, tanto en Kickstarter como Indiegogo, la mayoría coinciden en que la llave del éxito radica en una pre campaña exitosa, es decir, que antes de lanzar la campaña en sí, debe existir un trabajo de preparación y expectativa, donde se construya la base de seguidores y se estructure todo el trabajo que se realizará durante el mes que tarde la campaña (que algunos estiman puede ser un año), con esto se intenta asegurar, hasta donde se pueda, que la campaña tendrá éxito y se recaude la meta propuesta.
Digamos que lo de la ensalada de papa es un fenómeno aparte, difícilmente repetible, es algo así como cuando alguien nos cuenta un chiste, si lo intenta contar nuevamente no va a tener la misma gracia.
El otro esquema ganador, radica en tener un nombre respetable en nuestra rama profesional y contar con seguidores que de seguro van a aportar en cualquier campaña con tal de ver y obtener nuestro trabajo.
Normalmente el caso de la fama no es el de la mayoría pero eso no quiere decir que no tengamos un producto de calidad y muy atractivo. Lo que sí debemos hacer es mostrar nuestro trabajo, no existe otra forma de hacer los sueños realidad; nadie se va a meter en mis archivos privados para ver los proyectos geniales, ni mucho menos van a inmiscuirse en mis pensamientos para conocer esos productos revolucionarios que guardo y que en un “mañana” se convertirán en realidad.
Un inicio puede ser crear una especie de blog o fan page de Facebook donde expongas ideas preliminares del proyecto, como decir trailers o imágenes, para ir enganchando a los seguidores y contándoles de qué se trata.
Veamos lo siguiente, David bajo la experiencia que tuvo en Indiegogo, no recomienda la plataforma para lograr financiamiento, sin embargo eso no lo desanima para continuar con su objetivo y más bien insta a buscar e investigar otras fuentes de financiamiento. Y es que nosotros como artistas creadores, tenemos las herramientas suficientes para generar contenidos, lo que realizamos y creamos, no lo debemos ver por debajo del hombro o como algo que se pueda realizar en un futuro muy lejano, ni mucho menos como un imposible. Tenemos en nuestros pensamientos y nuestras manos la capacidad de crear productos que pueden resultar muy atractivos para muchas personas, pero esto no lo sabremos hasta que lo mostremos al público.
Regularmente siempre pensamos en un futuro mejor y próspero, quisiéramos alcanzar el éxito en algún momento de nuestras vidas, ser artistas reconocidos y contar con nuestro propio estudio, donde llevemos a cabo estos sueños. Pero la pregunta que debemos hacernos es ¿Estamos haciendo algo hoy para lograr el éxito de “mañana”?
Nuestros sueños por lo general son anhelos que parecen imposibles y que siempre buscamos alguna excusa para postergarlos, es entonces, donde pensamos que tener un trabajo “estable” y “bien remunerado” es la meta de nuestras vidas, no lo vemos como un medio temporal para que nos permita buscar hoy las fórmulas del éxito. Muchos de mis colegas, en esta situación, añoran algún día convertir sus sueños realidad pero su rutina es incompatible con este objetivo, todos los días destinan al menos 8 horas para realizar lo que sus jefes les solicitan y en sus ratos libres, no dedican ni una hora en trabajar por los objetivos que cumplan sus sueños. Es decir, no crean un plan de vida y, en muchos casos, sus sueldos apenas les permiten sobrevivir al mes.
No es una crítica para mis colegas, la verdad la mayoría de la población mundial cree que este es su destino y que buscar sus sueños no es más que una locura fuera de lo que consideran la “realidad”. Pero desde mi punto de vista, es más fácil buscar excusas que soluciones, trabajar en nuestros sueños implica laborar gratis por algún tiempo, sacrificar un poco de tiempo de ocio para destinarlo a crear, además, significa agotar nuestra energía diaria, menos horas de videojuegos, postergar ver una película, en fin, hacer esfuerzos en pro de un objetivo.
Pero lo gratificante que puede ser obtener resultados del esfuerzo, no tiene comparación, además, si le sumamos que puede ser nuestra llave a una independencia económica, mejor aún.
Entiendo que no es fácil dar el paso inicial, muchas veces sabemos lo que queremos pero no tenemos idea por dónde empezar y, esta traba inicial, es la que da al traste con nuestros objetivos y muchas veces nos desaniman.
Me voy a tomar la atribución de hacer recomendaciones sencillas, según mi experiencia, para dar el paso inicial a cualquier proyecto que quieran emprender.
Lo voy a desglosar en 4 pasos:
Paso 1
Definamos no solamente lo que queremos hacer sino hacia dónde queremos llegar:
Es decir, cuál es nuestra meta final, a donde nos vemos en uno, tres o diez años, deben ser sinceros con ustedes mismos pero al mismo tiempo anímense e imaginen ese objetivo culminado. Si es hacer un cómic, imaginen cuál es la cúspide de ese logro, tal vez sea vender más de 1000 copias en 2 años o, en 5 años, vender hasta licencias de merchandising para la elaboración de juguetes. Es decir no se limiten, sueñen en grande.
Paso 2
Organicen un plan para llegar a ese objetivo final:
Una vez que saben a dónde quieren llegar, deben responder a las siguientes preguntas:
¿Cómo voy a llegar al objetivo planteado?
¿Qué es lo primero que debo hacer?
Será que antes de sentarme a crear y producir ¿debo realizar una investigación?
¿Debo primero educarme en temas que desconozco que me permitirán una mejor preparación antes de empezar a producir?
¿Qué sigue luego de la producción está realizada?
Paso 3
Establezcan tareas diarias, semanales, mensuales y hasta anuales:
Que sean tareas realizables, no coloquen acciones que ustedes mismos saben que no las podrán hacer porque no cuentan con el tiempo suficiente o la preparación necesaria. No lo hagan pesado, si deben dedicar 1 hora al día o a la semana para no perder el entusiasmo inicial, entonces, valoren hacerlo así, pero no dejen que pase mucho tiempo y tampoco eliminen del todo la socialización con amigos, familiares o colegas, en la mayoría de los casos es combustible para seguir adelante.
Paso 4
Estén seguros de que el proyecto es algo que aman y que soportarán lo que sea que venga:
Su pasión por este proyecto debe ser mayor que las dificultades o el paso del tiempo.
En estas recomendaciones analicen todas las posibilidades, vean casos como el de mi colega David y el de otras personas, puede ser que Kickstarter, Indiegogo u otras plataformas sean o no una opción viable para ustedes.
¿Quién es David Álvarez?
Ilustrador y animador costarricense, David estudió animación digital en la Universidad Veritas, aún sin concluir la carrera, su talento y conocimientos lo llevó a laborar en Martestudio, donde trabajó en animación formando parte de diversos proyectos animados. Posteriormente tuvo la oportunidad para trabajar fuera del país, específicamente en Islandia, donde en 2 períodos trabajó para series animadas como la muy conocida Talking Tom, basada en la aplicación para celulares, del gato que repite lo que decimos. Tras su regreso decide dar un paso importante como emprendedor y junto a Virgilio Solís, crean Sunna Enterntainment, empresa independiente creadora de videojuegos.
Espero en otro artículo hablar a fondo de cómo funciona paypal y analizar temas de comercio digital.¡Hasta un próximo artículo!
¡Su éxito es mi éxito!
Franco Céspedes